No tiene ojos, ni boca, ni nariz. Si no fuera por ese pequeño detalle, podría ser como una personita cualquiera. Su cuerpo no está lleno de venas, músculos y huesos sino que tiene pequeñas bolitas que hacen que tocarlo sea una experiencia relajante. Divertida. Su piel es de color naranja, de ahí su nombre, no creaís que se lo puse en honor a la mascota de aquellos mundiales (aunque podría ser). Ya van a hacer unos añitos que llegó a mi casa, en forma de regalo pos-vacacional. Creo recordar que fue por el 2004. Desde ese día, él es quien comparte cama conmigo todas las noches. Un amigo visible pero invisible a la vez. Algunos pensareís que solo es un muñeco, pero en realidad es algo más. Es como ese peluche al que te aferras de pequeño y eres incapaz de soltar. Abrazada a él cierro los ojos. Noche a Noche. Y estoy segura. Duermo tranquila.Él siempre está ahí. Nunca me falla. Noche a noche. Día a día. Ahora ya le conoceís. Es Naranjito.
1 comentario:
Bueno, yo pensaba que naranjito era otro muñeco. Pero no pasa nada, aquí cada uno llama a su peluche como quiere. Mi amiga tiene uno exactamente igual, pero verde, y lo llama ranita o algo así. jaja!
(Muy guapo el texto)
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